miércoles, 1 de junio de 2016

¡Conociendo "La Rosaleda"!

Como aficionada al fútbol, uno de los lugares que más ganas tenía de conocer en Málaga era su estadio, La Rosaleda. Afortunadamente, mi deseo se cumplió y la experiencia fue mejor de lo que pude haber imaginado.
Vista exterior del inmueble.
Vista interior del estadio lleno durante un partido del equipo.

Fue inaugurada el 13 de abril de 1941, tiene una superficie con césped y sus dimensiones son 105 x 68 metros. Además, tiene una capacidad de 30,044 espectadores y fue una de las sedes de la Copa del Mundo 1982, albergando tres encuentros de la misma.

Sus instalaciones acogen una de las tiendas oficiales del Málaga CF, así como un centro médico privado. De forma similar al estadio Héctor Espino en Hermosillo, el inmueble tiene la particularidad de contar con una casa en su interior habitada por el conserje y su familia desde hace varias décadas.

En diciembre del 2009 se abrió en su interior el MCF Museo & Tour, en el cual se da un recorrido por los más de 100 años de historia del equipo. 

He visitado el recinto en tres ocasiones. La primera, como parte de una actividad organizada por ESN, el cual fue un recorrido al museo del equipo y las instalaciones del estadio, la segunda, el partido del Málaga CF vs. el Valencia (el cual terminó en victoria para el visitante 1-2) y la tercera, cuando fui a tomar fotografías de día de los puestos de comida y souvenirs previo al encuentro del local en contra del Espanyol.

A continuación les presento algunas imágenes de mis idas a La Rosaleda:

Entrada al museo.
Vista interior del estadio.
¡Yo afuera del estadio :)!
¡Entre grandes!
Playeras de grandes jugadores que disputaron encuentros contra el Málaga CF.

Playeras del equipo a lo largo de la historia.
Vista interior del estadio durante el partido del Málaga CF vs. Valencia.


Los bocadillos y souvenirs:






El ambiente que se vive en un partido de fútbol es muy diferente al que se siente en Hermosillo. Los espectadores están pendientes al 100% del encuentro, gritan constantemente al arbitro y tienen sus propios cánticos y porras para el equipo y los jugadores.

El medio tiempo se aprovecha para comprar la comida que se vende en el estadio, la cual consiste en dulces, palomitas, papitas, tortas, entre otros alimentos menos elaborados que los que vemos en el Héctor Espino.

Finalmente, lo que más feliz me hizo fue que tuve la oportunidad de conocer al gran portero mexicano Memo Ochoa, al que esperamos al terminar el partido. Al salir en su carro y ver la bandera de México que traíamos, se detuvo y estacionó, nos preguntó como estábamos y se tomó fotos conmigo y mis roomies. 

La verdad es que se portó super amable y aunque lamentablemente no pude verlo jugar después como titular, me siento muy contenta por el éxito que tuvo en sus intervenciones y el buen sabor de boca que dejo en los malagueños.

¡MEMO OCHOA!

¡Apréndete y canta el himno del Málaga CF!




¡Hasta la próxima!

5 comentarios:

  1. Deseo cumplido, lindo estadio y el ambiente mejor.

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  2. A ver cuando vuelven a la Champions, Ya no tienen a Isco :/

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  3. A ver cuando vuelven a la Champions, Ya no tienen a Isco :/

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